miércoles, 27 de mayo de 2009

el barco, el sueco y la boda

Llevo un par de días en Gotenburgo y no paro de reirme solo, me lo tengo que mirar. Hay un pequeño barco que cruza el canal y que sale cada 10 minutos de un lado al otro. El barco llega, carga y se va, por eso la gente corre como descosida para llegar (yo no, a mi me importa muy poquito). La mayoría de los pasajeros son gente joven (como yo) en bicicletas (no comments) pero otros que van a pie con la bandolera negra en el costado para llevar la cartera, en lugar de llevarla en el bolsillo de atrás que es como dicen los fabricantes de pantalones.

El descojono número uno ha sido cuando estaba esperando el barco y a lo lejos viene un grupo de siete chavales entre 20 y 25 años. Vestidos todos igual, pantalones negros, camisa blanca de Armani, gafas de D&G y peinado entre Sting y la bruja Lola, eso si, todos con los pantalones caídos para enseñar los calzoncillos de Calvin Klein.

En eso aparece el barco al otro lado del espigón, y los siete se ponen a correr, pero…, no pueden. Mantener una postura digna mientras corres, la bolsa negra te está dando golpes en el culo, se te empañan las gafas del sudor y te tienes que sujetar los pantalones con una mano no es fácil, de hecho, no lo han conseguido. No es plan de descojonarse a viva voz por eso del choque cultural así que esbozo una sonrisa y miro a mi alrededor para encontrar afinidad de pensamiento y en ese momento, encuentro un sueco a mi lado con una sonrisa que muestra las 32 piezas dentales del un amarillo impoluto. Nos sonreímos mutuamente y se acerca lentamente a mi lado. En ese momento descubro que el sueco acaba de llegar de visitar la fábrica de DYC y tiene un aliento que como respire por popa cinco gaviotas caen a plomo sobre las hélices del barco.

Me empieza a hablar en sueco (o eso creo) y le digo en un perfecto británico:"Sorry, I do not speak swedish", pero con la melopea que lleva como si le digo que se parece a Paco Porras. Que hacer?, que se dice en momentos así????: "Si, si claro". Como soy un hombre de recursos se lo digo con idiomas y le digo: "Da Da" (con dos cojones), claro, en ese momento mi descojono interior rebosa y vuelvo a reír, lo que Paco Porras interpreta como una aceptación a sus comentarios y sigue expectorando sobre mi cara.

Nada más salir del barco y despedirme de Porras miro el reloj y son las 8:00 p.m., me tengo que ir a cenar que todos los restaurantes cierran a las 9:00. Cenar solo es una pena, pero he encontrado una terraza con mesas pequeñas donde te puedes tomar un plato de pasta y pasar desapercibido (gracias a Dios soy pequeño y no se me nota apenas).Justo en frente de la terraza veo una tienda de moda y ya no he podido parar de reirme hasta que os estoy escribiendo esto.

En la foto podéis apreciar lo que viene siendo lo último en bodas aquí en Suecia: vestido tulipán invertido con bonito broche familiar de "a doblón de oro" sobre el escote. Siempre se ha hablado de la sexualidad de los Suecos, pero vamos, ver entrar a la novia en la iglesia con el ramo de flores entre las piernas debe ser un espectáculo de mil pares. En la foto no se aprecia, pero el ramo es de los chinos. Me apostaría la mano izquierda a que lo más fashion es llegar con el ramo luminiscente. No puedo imaginarme el dispositivo: el ramo de rosas entre las piernas, un pequeño cable de 20 cm. y tres pilas de voltio y medio que van metidas en el culo. Incomodo un rato, pero bonito!!!!

2 comentarios:

molinos dijo...

Varias cosas:
- ¿ Viste el reportaje de Madrileños por el Mundo sobre Goteborg? Lo pusieron la semana pasada.
- Sobre enseñar los calzoncillos ya sabes lo que opino.
_ La moda nupcial innerrable, pero lo que mejor se aprecia en la foto es que sales tú reflejado. me descojono pensando en tí enfrente de una tienda de novias haciendo fotos.
- Y si, en efecto, eres pequeño y pasas desapercibido. Doy fé.

jajajajaja

Pit dijo...

No, no lo vi, una pena,
lo delos calzoncillos debe ser el uniforme de la clase alta, por que los que veo currando no llevan, se les ve perfectamente el culo